AEROGENERADORES EN VIADUCTOS
La red de carreteras de nuestro país cuenta con grandes puentes que han sido objeto de investigación de un gran equipo de ingenieros europeos, tomando como referencia el viaducto del Barranco del Juncal, en Gran Canaria. ¿Y si se pudiesen incorporar a estos grandes puentes aerogeneradores de grandes dimensiones con el fin de generar energía renovable?
Los cálculos de este grupo de investigación así lo confirman. Esta idea podría aplicarse en territorios masificados con este tipo de infraestructuras, o bien en áreas naturales donde se limita la construcción de nuevas instalaciones.
Dicho estudio se ha basado en modelos y simulaciones por ordenador llevadas a cabo por el investigador Óscar Soto. “Como es natural, cuanta más superficie abarque el rotor, más potencia se puede extraer; sin embargo, hemos visto que en turbinas pequeñas la relación de potencia producida por metro cuadrado es mayor», explicó Soto, quien considera que la instalación de dos turbinas idénticas sería la más viable para incorporar a los viaductos.
Si solo se tuviese en cuenta la potencia producida, las mejores soluciones serían instalar dos rotores de tamaño diferente –para abarcar la mayor superficie posible–, o bien una matriz de 24 turbinas pequeñas –por su potencia por unidad de superficie y peso ligero–, pero en lo que respecta a la viabilidad, triunfa la opción de los dos rotores iguales con un tamaño medio.
“Esto equivaldría al consumo medio de unas 450 o 500 viviendas”, apuntó Óscar Soto, quien añadió: “Una instalación de este tipo evitaría la emisión de unas 140 toneladas de CO2 al año, una cantidad que representa el efecto de depuración de unos 7.200 árboles”.
De llevarse a cabo este proyecto, estaríamos ante el nacimiento de una nueva forma de generar energía eólica, haciendo uso de unas infraestructuras ya existentes, aprovechando estas construcciones y abaratando costes, impulsando además las energías renovables en ubicaciones atípicas y posiblemente muy efectivas.